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Diástasis abdominal

La diástasis abdominal también llamada diástasis recti es una disfunción de la pared abdominal, donde existe un aumento de la separación de los músculos rectos anteriores del abdomen, “esos a los que llamamos tableta de chocolate”.

Cuando la separación de estos músculos es mayor a 2,5 cm y el tejido que los separa no tiene una buena respuesta ante un aumento de presión abdominal, se considera que hay diástasis recti.

La diástasis abdominal puede producir:

  • Hernias umbilicales.
  • Aumento del tamaño abdominal.
  • Molestias y dolores de espalda.
  • Debilitamiento del suelo pélvico.
  • Mayor riesgo de prolapso e Incontinencia urinaria.

Cómo identificar la diástasis abdominal

Una forma de saber si tienes esta disfunción, es colocar los dedos a unos 3 cm por encima del ombligo, y hacer una elevación de tronco, como cuando hacemos un abdominales, y observaremos si los dedos se hunden dentro de esa línea alba, o son expulsados por el acercamiento entre estos músculos. Pero la mejor forma de valorar la diástasis es mediante una prueba ecográfica, donde mediremos con exactitud y veremos de forma objetiva el comportamiento de esta estructura. Además podremos medirla en varios puntos, varias posiciones y realizando diferentes ejercicios, y así poder pautar de forma personalizada los mejores ejercicios a realizar, y lo más importante, valorar qué ejercicios no se deberían ejecutar para no perjudicar la estructura.

A tener en cuenta:

  • Se puede confundir con una hernia en la pared del abdomen al estar asociada con una protuberancia abdominal, pero la diferencia es que la diástasis no produce un estrangulamiento como podría provocar una hernia abdominal.
  • Puede presentarse por encima y/o debajo del ombligo y se aprecia cuando el paciente se tumba, eleva el tronco o hace una elevación de la pierna.
  • Puede presentarse tanto en hombres como en mujeres, siendo más habitual en la mujer después del parto.
  • El 100% de las mujeres tendrán diástasis durante el embarazo ya que es imprescindible para dar espacio al bebé, pero alrededor de la sexta o séptima semana postparto, esta estructura debería volver más o menos a la normalidad.
  • Es importante realizar una valoración con un/a fisioterapeuta especializado/a para saber cuando retomar la actividad física y qué ejercicios son los más adecuados para cada mujer.
  • También será importante beber mucha agua y seguir una dieta sana y equilibrada.

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